Hoy leyendo un blog que sigo… entendí y me cayó el veinte de
mucha de mis locuras… y me recordó al inche conejo… si mi amor propio… ese que aún
no termino de aprender… que siempre ando buscando refugiarme en un par de
brazos cuando siento que mi piso se
mueve… y aunque creo en mi… y me he
caído un millón de veces, y perdí durante mucho mucho tiempo hasta las ganas de
llorar, el camino, el tiempo, siempre vuelvo al mismo punto de partida… ese
amor propio… que me cuesta mucho defender, por el tipo de empatía que nace de
mi… si me quiero mucho, me respeto y me amo, pero hay veces en que mi amor
propio… se pierde y dejo que ganen esa ganas locas, de perderme en un abrazo
aunque sé que no es sincero… que no se va a quedar que solo eso un abrazo de
ocasión…que fortalece solo mi orgullo,
si lo se… eso no es amor propio…
Mi amor propio creo que no es de este mundo,
Por la empatía que nace de mí…
Se lo que quiero…
Y sé lo que puedo
llegar a dar…
Y también sé que todo es posible bajo este inmenso cielo
azul…
Pero hay días… en que entre el barullo…
Las responsabilidades te cansas de tanto caminar…
Y en ese punto exacto donde deberías decir no…
Se acabó el juego…
Solo guardo silencio…
Y te quedas a ver que más hay…
Al final ya sabemos que me marchare…
Pero esa pizca de fé… es lo que mantiene…
Y si mi amor propio, lucha siempre con esa pizca de fé…
Que aun guardo…
Y que es lo único que
quedo del ayer…
Y sigo buscando esa pizca de fé…
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