Confieso mi soledad

través de mis últimos años la soledad había sido fiel compañera por convicción, no me estorba estaba tan acostumbrada a ella que era parte de mi vida, sabia que algo faltaba en mi vida y ella llenaba esos momentos de desesperación, hasta que un día la inquietud de tu presencia acompaño mi andar dude muchas veces dejarte entrar en mi vida, porque sabia que podía ganar o perder, y que si esta ultima era fruto de tu presencia el vació que dejarías seria inmenso, ya lo había vivido antes, por eso me abstenía de ti, pero llegaste con tal fuerza que no me di cuenta en que momento entraste en mí, solo reconocí el frenesí de tu esencia, donde todo es nada y nada es todo, donde mi cordura se pierda, donde tu esencia era la mía, donde tu locura era mi vida, pero la nada se atravesó entre vos y mi andar, y el vació volvió, los silencios fueron eternos y aun sigue en mi memoria, mi soledad siguió su rutina, recordándome que todo había vuelto a ser como antes donde tu ya no estabas, solo el dejo de tu paso, mi cordura volvió a su sitio donde siempre estuvo, pero ahora tengo un nuevo compañero en mi andar tu recuerdo, tu mirada, nuestros sueños, que ahondan en el vació que nos separa… hoy confieso mi soledad no como reproche o desdeño, solo como lo que es mi fiel compañera que me recuerda que esta vida es jugarse el todo por el todo que hay gente que vive en su zona de confort y que no la puedo cambiar mas que entender, aprender y disfrutar los momentos que te den. Hoy partiste de mi vida y el motivo no lo se, la vida sigue y yo también…